Un menor de trece años que se dedicaba a las labores de "buceo", en el vertedero de Rafey murió aplastado por un camión recolector de desperdicios cuando recogía metales en el lugar. El niño fue identificado como Alberto Ureña, quien residía en el sector La Otra Banda con sus padres.
El cuerpo del joven fue llevado a la morgue del hospital José María Cabral y Báez y luego trasladado al Instituto de Patología Forense de Santiago para realizarle los exámenes correspondientes.
Diariamente cientos de niños y adolescentes provenientes de lugares marginados se dedican a recoger todo tipo de metales, comida desechable, lencerías y otros productos en el vertedero.
Hace 9 meses otro joven fue muerto por el mismo camión en el vertedero de Rafey, mientras que una madre soltera perdió su mano tras ser chocada por el mismo vehículo.
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