Agobiados por la hipoteca, la caída de sus acciones o el desempleo, cada vez más estadounidenses están echando mano de un recurso que nunca pensaron que utilizarían- sus tejidos y fluidos corporales.La venta de sangre, semen, óvulos o, incluso, el pelo ha crecido con fuerza en los últimos meses en Estados Unidos, donde numerosas agencias afirman que cada vez más personas intentan vender su semen o sus óvulos, aunque no todas pasan los estrictos controles.
Mientras el número de estadounidenses que recibe el subsidio de desempleo alcanzó el pasado mes el récord de los últimos 26 años, el tráfico en sitios como BloodBanker.com, especializado en información sobre donaciones de sangre retribuidas, ha aumentado un 50 por ciento este otoño.
El precio por una donación de plasma puede llegar hasta los 50 dólares en Estados Unidos. Según la asociación Plasma Protein Therapeutics, la tendencia al alza comenzó ya en 2007, cuando el número de donaciones creció hasta los 15,3 millones frente a los 10,3 millones de 2003.
Más rentable aún es la donación de esperma, con precios de entre 60 y 100 dólares por sesión. El banco de esperma Seattle Sperm Bank, en el estado de Washington, asegura que recibe actualmente unas 150 peticiones para donar, tres veces más de lo habitual en estas fechas.
Incluso el cabello puede ser un valor al alza en tiempos de crisis. El sitio en internet TheHairTrader.com, una de las principales plataformas de compraventa de pelo, dice que ha recibido un 20 por ciento más de visitas en los últimos dos meses.
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