Tras salir de la cárcel el pasado viernes después de llevar en prisión 18 años por un crimen que no cometió, Fernando Bermúdez, de ascendencia dominicana, dijo haber encontrado un alto Manhattan distinto, hará un replanteamiento de su vida y piensa terminar un libro que recoge el víacrucis que le ha tocado vivir, para que sirva de ejemplo a las actuales y futuras generaciones, ya que otros seres humanos permanecen tras las rejas inocentemente.Asimismo, Bermúdez, de 40 años, se lamentó de que durante el largo tiempo que estuvo en prisión, ningún representante de los gobiernos que se han sucedido en la República Dominicana desde entonces lo hubiesen visitado para ofrecerle orientación, información o asesoria legal, no obstante ser hijo de padres dominicanos.
Bermúdez, de 40 años, dijo que estuvo guardando prisión en varias cárceles, entre ellas la Rock Island, de Queens, y logró una beca para estudiar Ciencia sobre Comportamiento Humano en conexión con Hudson Line School y Mercy College por lo que espera ahora completar unos 15 créditos que le faltan para obtener una licenciatura.
Adelanto que ya ha escrito la mitad del libro que ha titulado “No culpable de muerte”, y en el mismo enfoca su situación de “depresión que tuve y la esperanza que tenia y la lucha que siempre tenia que seguir p’lante, una lucha libre sobre esos elementos”.
Con su esposa Cristal, el ex reo Fernando ha procreado tres niños: Sheila, Karitza y Fernandito.
Sintió la mayor felicidad de su vida cuando fue firmada su orden de libertad ocho días después de ser declarado inocente por el juez John Cataldo, en una Corte Federal de White Plaín, y pudo regresar a su casa, desde donde salió con su esposa Cristal y sus niños para dirigirse a un lugar a “comer hambergues”.
El ex prisionero visitó luego a sus familiares residentes en el 590 West de la calle 204 en Inwood, en el alto Manhattan, donde su madre le guardo un plato de arroz, habichuelas y carnes de pollo y chivo guisadas. Tenia mucho tiempo que no comía mi comida preferida!”, exclamóHabía sido condenado en 1991,a la edad de 23 años,de por vida en prisión por el asesinato de Raymond Blunt (16), pero nunca se presento de parte de la fiscalia la evidencia física que le ligara al crimen, sino que solo se baso en testigos que identificaron a Bermúdez como el pistolero, lo que luego negaron.
Testimonios favorables
a Fernando Bermúdez dijo que el primero de septiembre pasado fue cuando se inició el nuevo juicio siendo presentados 11 testigos que con sus testimonios lo favorecieron en la Corte, cuando ya los testigos de la fiscalía dijeron su versión original que lo inculpaba.
Indicó que la fiscalía presento entonces cinco testigos “y el juez declaro totalmente inocente en noviembre 12 de 2009, el día más maravilloso pa’mi. Lo que paso fue después de ahí, yo no lo creía, pues aun teniendo la orden al ser declarado inocente yo no podía irme pa’la casa porque tenia un caso pendiente de droga que estaba peleando desde 1991”.
Sin embargo, dijo que celebra que ya este en libertad, la cual –cuando fue declarada al autorizársele irse de regreso a su casa, “mi madre brinco, bailo y le dimos gracias a Dios en ese momento. Y yo no sabia ni que hacer y los mismos guardias no sabían si eso era cierto, pero ese fue el mensaje que vino”.
Demanda
Dijo que por ahora no ha contemplado presentar una demanda contra la Ciudad de Nueva York por compensación por los añnos que se le mantuvo en prisión injustamente. “Ahora mismo yo lo que estoy es gozando la libertad y… vale más que todo, y tratando de evaluar mi vida por que me paso esto, que yo puedo hacer bueno en toda mi vida de ahora p’adelante”, expresó.
Añadió que lo más importante para él es “saber donde tu estas ahora y saliendo de la cárcel limpio”.
Bermúdez dijo que esta ansioso de visitar la República Dominicana, pero debe primero consultar a sus familiares y a sus abogados Leslie Risinger y Barry Pollack para confirmar que puede viajar a otro país, ya que aun tiene pendiente en la justicia un caso de “conspiración”.No cree que la Corte Federal Estatal vaya a apelar la sentencia del juez Caldo “porque no tendrá ningún merito” y aunque tiene la opción de apelar “no veo que argumento ellos puedan tener porque la videncia mía de que yo soy inocente es tan fuerte y tan favorable que lo que se van a ver de verdad es más brutos, la misma cosa que no debían seguir de la que le presentamos evidencia de mi inocencia”. Bermúdez nació y se crió en el alto Manhattan y su madre, Daniela Altagracia Vargas de Bermúdez, de 62 años, vivía en la calle Juan Pablo Pina número 54 de la Capital, cuando emigro en 1964 a EEUU.
Compensar tiempo prisión
El exprisionero Fernando Bermúdez dice esperar se le compense el tiempo que ha estado inocentemente tras las rejas con la sentencia que espera sobre la acusación de un delito de drogas. Sus abogados Risinger y Pollack solicitaron a las autoridades federales que dieran por cumplidos los 27 meses de cárcel que conlleva el delito.La sentencia se emitirá el 30 de junio 2010, cuando acuda a la Corte de White Plains a oir el veredicto, pero espera se haga un calculo en base al tiempo que estuvo en prisión.
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