El cantante de música norteña Ramón Ayala y miembros de dos grupos musicales más fueron detenidos durante una redada en una fiesta de Navidad de un cartel de la droga, en una muestra de la audacia de los traficantes para realizar fastuosas reuniones a pesar de estar en la mira de las autoridades. Un portavoz de la Procuraduría General de la República (PGR) dijo que Ayala y los integrantes de los otros grupos quedaron en libertad el sábado tras ser interrogado y no se les imputó ningún cargo.
La noche del jueves Ayala y su banda norteña Los Bravos del Norte realizaban una presentación en una de las residencias de un exclusivo fraccionamiento en la localidad de Tepoztlán, cuando infantes de la Armada irrumpieron y se desató un enfrentamiento que se extendió hasta la madrugada del viernes y que dejó tres presuntos sicarios muertos y 11 detenidos.
Junto a Ayala y su banda fueron detenidos e interrogados los Cadetes de Linares de Lupe Tijerina y el grupo Torrente, que amenizaban una fiesta atribuida al cartel de los hermanos Beltrán Leyva, una de las seis grandes organizaciones del narcotráfico reconocidas por las autoridades. La Secretaría de Marina informó el viernes que en la operación también fueron incautados 280.700 dólares en efectivo, 16 armas largas y cuatro cortas, además de 1.700 municiones de diferentes calibres. El acordeonista y cantante ganador de dos Latin Grammy vive en Hidalgo, Texas. Sus representantes se negaron.
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