Los cuatro árbitros estadounidenses que trabajaban en el torneo de béisbol invernal dominicano renunciaron ayer, un día después de la agresión del dirigente José Offerman contra Daniel Rayburn.
Justin Vogel, Jason Bradley, Barry Larson, y Rayburn informaron a los directivos de la Liga Dominicana que no seguirían laborando en el torneo, cuya serie final inicia hoy, porque se sienten amenazados.
“Los árbitros estadounidenses nos informaron que no seguirán ejerciendo sus funciones porque recibieron amenazas de algunos fanáticos después del partido'', dijo Gabriel Hernández, subadministrador de la Lidom. El sábado, Offerman lanzó un puñetazo a Rayburn, luego ser expulsado por discutir conteo de bolas y strikes.
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