La tragedia del terremoto que destruyó la capital haitiana condujo a Stephanie Hernández a un reencuentro con su padre, a quien no veía desde hace más de 20 años.
La joven de origen dominicano forma parte de los 162 pacientes que han sido trasladados desde Haití al hospital Darío Contreras con fracturas en la columna vertebral que la mantienen inmovilizada.
A su llegada al hospital, la madre de Stephanie, de nacionalidad haitiana, Mireya Hernández, informó al padre de ésta sobre lo sucedido con su hija y le pidió ayuda para conseguir sangre que necesitaba de urgencia para la joven herida, lo que posibilitó el reencuentro entre padre e hijas, incluyendo a otra que procreó la pareja.
Stephanie cuenta con 23 años y salió del país de mano de su madre y hermana cuando apenas tenía tres.
Su caso salió a relucir luego de que los medios de comunicación dieran cuenta de que entre los heridos en el hospital había una dominicana que requería de un aparato especial para recuperar el movimiento de la columna, cuyo costo es superior a los RD$100,000, suma con la que no cuenta la familia.
Finalmente, el dinero le fue facilitado en calidad de préstamo, según la madre, por una persona que pidió el anonimato y hoy la joven será operada.
El padre de la muchacha, de nombre Joaquín es un raso de la Policía Nacional que labora en el departamento de Inteligencia del organismo.
Aseguró que se mantenía en comunicación con sus hijas, pero su situación económica le impedía visitarlas.
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