SD. Desde la etapa preescolar la vida de los pequeños está llena de actividades físicas y mentales, por lo que un desayuno adecuado o complementar su alimentación con un lunch nutritivo hará que rindan al máximo y tengan excelente desempeño.Los padres deben estar conscientes de que un niño que desayuna de manera adecuada obtiene mejores resultados en las actividades que realiza diariamente. Por el contrario, si el pequeño está malnutrido tendrá problemas de atención y falta de energía.
Lo ideal es que en el desayuno se consuman alimentos de los cinco grupos básicos (cereales, frutas, vegetales, proteínas y grasas), en una cantidad no excesiva, por supuesto, para que el niño no sienta pesadez en el estómago.
Los carbohidratos son buena fuente de energía durante la mañana, por lo que el infante puede consumir pan, que de ser integral proporcionará fibra importante para la salud de su estómago. Un ingrediente esencial es el huevo, que preparado de la manera que se desee, brinda proteínas, grasas y fósforo que protegen a las células del organismo y fortalecen los huesos. La combinación de alimentos ayudará a que el niño siempre tenga deseos de desayunar y no se aburra de comer siempre lo mismo.
Recuerde que una buena nutrición repercutirá directamente en la salud y el estado de ánimo de su hijo, quien no tendrá ningún pretexto para sentirse desganado o cansado.
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