Como un abuso fue calificada la actitud de miembros de la Dirección General de Migración que ayer tarde, con el periódico El Nacional en las manos, se llevaron preso al haitiano Nicodem Cony, y su esposa Yoselin Guerrier, no fue detenida porque logró huir.La pareja se hizo popular desde que el martes El Nacional los captó en plena mañana dándose un beso en el área verde situada debajo del puente peatonal en la intersección de las avenidas John F. Kenndy y Máximo Gómez.
“Donde está Nicodem”, llegaron preguntando un oficial y cinco militares de Migración ayer a eso de las 2:00 de la tarde. Un teniente a bordo de una yipeta Ford, tres militares se desmontaron de un minibús y otros dos de una motocicleta, se tiraron en la intersección donde vendía tarjetas de llamadas la pareja y con El Nacional en las manos, llegaron y preguntaron por Nicodem.
“Yo soy Nocodem”, respondió responsablemente el extranjero, y a seguida los agentes de Migración le solicitaron sus documentos, y le pusieron de inmediato las esposas.
En conversación telefónica con Cony, éste dijo que ayer “ellos llegaron preguntando por mí con el periódico en las manos, me apresaron, me pusieron las esposas, los demás compañeros huyeron a igual que Yoselín (su esposa)”.
Agregó que le preguntaron por sus documentos y les dijo que estaban en sus bolsillos. “Los saqué y se los mostré, vieron que estaban legales y que tengo residencia en República Dominicana hasta diciembre”.
Nicodem dijo por teléfono a eso de las 10:15 de la mañana que “yo ahora estoy en Haina preso, me llevan para la Dirección de Migración de la Feria dentro de un rato, no sé con qué fin”.
El haitiano Miguel Loise, quien sostuvo reside en el país legalmente, al deplorar la actitud de Migración explicó que “ellos vinieron directamente a buscar a Nicodem, él mostró los documentos que están legales, no apresaron a otros haitianos porque huyeron”.
La actitud de los miembros de Migración fue deplorada ayer por personas que observaron la acción de los militares.
El Nacional volvió a contactar ayer a la joven pareja con el propósito de organizar y financiar sus bodas, pero se encontró con la grata noticia de que ya estaban casados.
Se casaron hace cuatro años y procrearon a Yonisca, de tres años de edad y a Jefrey, de año y medio. Yoselin expresa que siente gran placer de salir a trabajar junto a su esposo.
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