Los caballos Pura Sangre Inglés (PSI), son los más veloces, por eso son tan buscados para las carreras y también son los más caros, ya que las carreras de purasangres mueven muchísimo dinero, y un buen caballo, a lo largo de su carrera deportiva (la mayoría a los 6-7 años ya están retirados), puede ganar millones y millones de dólares. El caballo Bárbaro, por ejemplo, ganador del Derby de Kentucky en 2006 (luego fue sacrificado por una lesión que afectó su pata trasera derecha), estaba tasado en los US$30 millones, y por el pura sangre japonés Deep Impact se llegaron a pagar US$36 millones. En cuanto a los caballos de paso fino, esta es una disciplina que se ha vuelto muy competitiva además de lucrativa y muy cara de costear. Se le considera uno de los deportes más costosos por eso la mayoría de los jinetes van patrocinados por grandes empresas. Uno de estos caballos pueden alcanzar hasta entre US$7 millones y US$8 millones. Tampoco se puede obviar, dentro del mercado de caballos, a los caballos de polo, que también son costosos.
De Annet Cárdenas
Master en Educación Superior mención Docencia, Licenciado en Comunicación Social, Técnico Superior en Bibliotecología y Diplomado en Ciencias Políticas, Columnista del periodico El Nuevo Diario
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