Dinastía 1996-2001 se diluye; O’Neill y Williams se retiraron con honores ¿Qué hará el receptor?
Escrito por: Rolando Guante
(reportedelasmayores@hotmail.com)
Paul O’Neill anunció que la campaña del 2001 sería su última. El llegó de Cincinnati para convertirse en una de las figuras más importantes desde 1993, tercer bate, en la dinastía yankista que ganó cinco títulos de la Liga Americana y cuatro mundiales entre 1996 y 2001.
O’Neill, uno de los tipos más intensos que haya conocido el juego, se fue por la puerta ancha aun cuando los Yankees cayeron ante Arizona en el séptimo partido del Clásico de Otoño del 2001. Su despedida en Yankee Stadium fue memorable en el quinto choque de ese evento.
Bernie Williams, otra pieza imprescindible de esos grandes conjuntos, fue cediendo su puesto de jardinero central a otros más jóvenes y se retiró finalizada la campaña del 2006 como uno de los peloteros más respetados en la popular franquicia newyorkina.
Williams perdió mucho defensivamente, pero no dio pena como ocurre con Posada ahora y mucho menos O’Neill, quien bateó 21 H4 en su último año.
Del grupo de 1996 todavía están con los Yankees, Mariano Rivera, Derek Jeter y Posada.
El gran capitán tuvo su dificultad al querer un contrato de más dinero durante el invierno.. Mariano sigue haciendo el trabajo sin escándolos, pero Posada aparentemente no saldrá bien si no logra adaptarse a su nuevo rol en los meses finales de este año.
Hay jugadores que se resisten a ser superados por los más jóvenes, pues olvidan que alcanzaron un sitial porque dejaron a otros en el camino.
Posada quizás ya ha reflexionado pues le conviene más ser recordado como un grande de la generación 1996-2001.
Escrito por: Rolando Guante
(reportedelasmayores@hotmail.com)
 |
| Jorge Posada |
O’Neill, uno de los tipos más intensos que haya conocido el juego, se fue por la puerta ancha aun cuando los Yankees cayeron ante Arizona en el séptimo partido del Clásico de Otoño del 2001. Su despedida en Yankee Stadium fue memorable en el quinto choque de ese evento.
Bernie Williams, otra pieza imprescindible de esos grandes conjuntos, fue cediendo su puesto de jardinero central a otros más jóvenes y se retiró finalizada la campaña del 2006 como uno de los peloteros más respetados en la popular franquicia newyorkina.
Williams perdió mucho defensivamente, pero no dio pena como ocurre con Posada ahora y mucho menos O’Neill, quien bateó 21 H4 en su último año.
Del grupo de 1996 todavía están con los Yankees, Mariano Rivera, Derek Jeter y Posada.
El gran capitán tuvo su dificultad al querer un contrato de más dinero durante el invierno.. Mariano sigue haciendo el trabajo sin escándolos, pero Posada aparentemente no saldrá bien si no logra adaptarse a su nuevo rol en los meses finales de este año.
Hay jugadores que se resisten a ser superados por los más jóvenes, pues olvidan que alcanzaron un sitial porque dejaron a otros en el camino.
Posada quizás ya ha reflexionado pues le conviene más ser recordado como un grande de la generación 1996-2001.
0 comentarios:
Publicar un comentario
GRACIAS POR VISITAR GAZCUE Y DEJAR TU COMENTARIO.