El dueño del equipo rompe con patrones de los ejecutivos
SANTO DOMINGO. Sin enfundarse una franela, Mark Cuban es una figura que el seguidor promedio de la NBA reconoce a distancia.
Con una disposición similar a la de George Steinbrenner para firmar largos cheques a la hora de fichar un jugador de valía, Cuban compró a los Mavericks hace 11 años por US$285 millones y su figura es tan reconocida como Dirk Nowitzki o Jason Kidd.
Cuban, de 52 años, saltó de bartender a billonario y ha implantado un estilo rara vez visto en un ejecutivo en los deportes profesionales.
En vez de ver los partidos en palcos de lujo rodeado de magnates, lo hace al lado del tabloncillo vibrando con sus jugadores, y convertido en un aficionado más.
Fiel al estilo de los genios de la industria informática, Cuban rechaza los trajes costosos y viste de jeans, T-shirt y zapatillas deportivas. Su temperamento explosivo le ha convertido en el ejecutivo que más multas ha recibido (13) por las que ha tenido que pagar US$1,665,000.
Procedente de una familia judía, Cuban tuvo que recoger latas de cervezas para pagar su paso por la Universidad de Indiana, donde estudió negocios.
Hizo muchas labores y creó su propio servicio de computadoras.
En 1995, con su compañero Todd Wagner empezó el portal Audionet, que transmitía por Internet las estadísticas en tiempo real de los partidos del básquet universitario. La compañía creció y fue vendida cuatro años después a Yahoo! por US$5.9 billones.
Tiene gran interés en comprar un equipo de las Grandes Ligas.
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| Mark Cuban |
Con una disposición similar a la de George Steinbrenner para firmar largos cheques a la hora de fichar un jugador de valía, Cuban compró a los Mavericks hace 11 años por US$285 millones y su figura es tan reconocida como Dirk Nowitzki o Jason Kidd.
Cuban, de 52 años, saltó de bartender a billonario y ha implantado un estilo rara vez visto en un ejecutivo en los deportes profesionales.
En vez de ver los partidos en palcos de lujo rodeado de magnates, lo hace al lado del tabloncillo vibrando con sus jugadores, y convertido en un aficionado más.
Fiel al estilo de los genios de la industria informática, Cuban rechaza los trajes costosos y viste de jeans, T-shirt y zapatillas deportivas. Su temperamento explosivo le ha convertido en el ejecutivo que más multas ha recibido (13) por las que ha tenido que pagar US$1,665,000.
Procedente de una familia judía, Cuban tuvo que recoger latas de cervezas para pagar su paso por la Universidad de Indiana, donde estudió negocios.
Hizo muchas labores y creó su propio servicio de computadoras.
En 1995, con su compañero Todd Wagner empezó el portal Audionet, que transmitía por Internet las estadísticas en tiempo real de los partidos del básquet universitario. La compañía creció y fue vendida cuatro años después a Yahoo! por US$5.9 billones.
Tiene gran interés en comprar un equipo de las Grandes Ligas.
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