EL CUENTO DE TONTY NO PEGO

Involucrar al Palacio no se lo cree nadie...


Los personajes de los cuentos infantiles criollos, o que se hacen en los velorios de campo, seducen las mentes más adultas y sus historias resultan más sugerentes que las universalmente conocidas de conjuros, brujas y princesas.

Incluso, se los puede defender a capa y espada, pues Juan Bobo no era tan bobo, ni Pedro Animal tan animal. La risa era un elemento de circunstancia.

Tonty Rutinel, por tanto, pudo haber salido mejor librado con un cuento de Juan Bobo y de Pedro Animal que con esa historieta política que ni siquiera llega a Paquito, de que su persecución y sometimiento fue un plan del gobierno.

Debió saber que la opinión pública no es tan tonta, y menos los perredeístas, que saben que la agredida y toda su familia pertenecen al partido blanco y que a ninguno se le puede señalar como tránsfuga.

Toda defensa es posible, y si quiso presionar a fiscales y jueces convocando la solidaridad de sus compañeros, y la turbamulta funcionó, no tenía por qué involucrar en su expediente al Palacio Nacional.

Que recuerde que Juan Bobo no es tan bobo, ni Pedro Animal tan animal.
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Editor Gazcue es Arte

Master en Educación Superior mención Docencia, Licenciado en Comunicación Social, Técnico Superior en Bibliotecología y Diplomado en Ciencias Políticas, Columnista del periodico El Nuevo Diario

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