En 1752 el estadista y científico Benjamín Franklin demostró que el rayo es una forma de electricidad. Inventó el pararrayos.
Para afilar las tijeras pase las hojas, como si estuviera cortando, sobre el vidrio del cuello de una botella o la base de una copa.
La niña prodigio de Hollywood, Shirley Temple, tenía 56 rizos en su cabeza.
La hipnosis debe su nombre al cirujano escocés James Braid quien, en 1842, lo asimiló con hypnos (dormir en griego), hermano de Thánatos el dios griego de la muerte.
Para acabar con las cucarachas coloque una mezcla de ácido bórico con azúcar en tapitas de plástico. Distribuya las tapas por distintos sitios. Las cucarachas lo consumirán y morirán en sus nidos.
La costumbre de escupirse las manos viene de la vieja creencia de que escupir evita males. Decían que si alguien es golpeado y escupe enseguida en la palma de la mano del agresor, el dolor aminora. También se creía que la fuerza de los golpes se incrementaba si se escupía en las manos antes de golpear.
Abraham Lincoln obtuvo la patente de señalizar con boyas las aguas poco profundas para que sirvieran de guía a los barcos.
Para cuidar el aspecto de los cuchillos de la cocina frote las hojas con un corcho.
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