Wang Jiping ha sido declarado culpable de desviar fondos públicos y recibir sobornos por más de 1,8 millones de euros
La justicia china ha condenado a muerte al antiguo responsable de la Oficina de Impuestos de la ciudad de Pekín, Wang Jiping, según ha anunciado la agencia oficial de noticias Xinhua.
El Tribunal Popular Intermedio número1 de Beijing ha decidido condenar a la pena capital, con una suspensión de la sentencia de dos años, a Wang, de 64 años de edad tras haberlo considerado culpable de de desviar fondos públicos y recibir sobornos por un valor total de más de 14 millones de yuanes (1,8 millones de euros) entre los años 2002 y 2009.
Según el tribunal, durante este periodo de tiempo Wang negoció empleos y contratos ventajosos a cambio de y regalos por un valor de 4,35 millones de yuanes (532.266 euros).
El ex responsable de la oficina fiscal de la capital china también fue declarado culpable de colaborar con una empresaria en la malversación de 10,47 millones de yuanes (1.28 millones de euros) en fondos de adquisiciones del gobierno entre los años 2002 y 2004, según señala el veredicto.
Según el tribunal, Wang Jiping no actuó sólo. Contó con la complicidad de su hermano, su hijo y otros parientes, que le ayudaron a amañar los procesos de adjudicación de contratos y empleos.
Wang, que fue detenido en agosto del año 2010, negó su culpabilidad durante la vista, así como haber estado en posesión de tal cantidad de dinero, según Xinhua.
El que fuera responsable de la Oficina de Impuestos de Pekín era considerado una persona “audaz y competente” que desde su puesto había impulsado una serie de reformas para combatir el fraude fiscal.
A raíz de las investigaciones iniciadas en torno a Wang Jiping, las autoridades descubrieron, asimismo, otros casos de corrupción en el mismo servicio fiscal. Concretamente, dos funcionarios fueron condenados en el 2011, uno a cadena perpetua y otro a diez años de cárcel, acusados de haber aceptado sobornos.
Wang Jiping |
La justicia china ha condenado a muerte al antiguo responsable de la Oficina de Impuestos de la ciudad de Pekín, Wang Jiping, según ha anunciado la agencia oficial de noticias Xinhua.
El Tribunal Popular Intermedio número1 de Beijing ha decidido condenar a la pena capital, con una suspensión de la sentencia de dos años, a Wang, de 64 años de edad tras haberlo considerado culpable de de desviar fondos públicos y recibir sobornos por un valor total de más de 14 millones de yuanes (1,8 millones de euros) entre los años 2002 y 2009.
Según el tribunal, durante este periodo de tiempo Wang negoció empleos y contratos ventajosos a cambio de y regalos por un valor de 4,35 millones de yuanes (532.266 euros).
El ex responsable de la oficina fiscal de la capital china también fue declarado culpable de colaborar con una empresaria en la malversación de 10,47 millones de yuanes (1.28 millones de euros) en fondos de adquisiciones del gobierno entre los años 2002 y 2004, según señala el veredicto.
Según el tribunal, Wang Jiping no actuó sólo. Contó con la complicidad de su hermano, su hijo y otros parientes, que le ayudaron a amañar los procesos de adjudicación de contratos y empleos.
Wang, que fue detenido en agosto del año 2010, negó su culpabilidad durante la vista, así como haber estado en posesión de tal cantidad de dinero, según Xinhua.
El que fuera responsable de la Oficina de Impuestos de Pekín era considerado una persona “audaz y competente” que desde su puesto había impulsado una serie de reformas para combatir el fraude fiscal.
A raíz de las investigaciones iniciadas en torno a Wang Jiping, las autoridades descubrieron, asimismo, otros casos de corrupción en el mismo servicio fiscal. Concretamente, dos funcionarios fueron condenados en el 2011, uno a cadena perpetua y otro a diez años de cárcel, acusados de haber aceptado sobornos.
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