POR BIENVENIDO ROJAS
Twitter: @bienvenidorv
Robinson Canó le admitió a Luz García que no fue bien tratado por los Yanquis.
Le tira y abanica.
Miguel de Cervantes Saavedra dijo que "el agradecimiento que sólo consiste en el deseo, es cosa muerta, como es muerta la fe sin obras".
El agradecimiento debe ser eterno, debe ser el principio número uno de la integridad del ser humano.
Canó le dijo a la conductora del programa "Noche de Luz" que los Yanquis no quisieron negociar con él durante el proceso del contrato, y que sólo ofrecieron US$175 millones como su oferta máxima.
Parece ser que Canó no entiende lo que es una relación obrero-patronal en el capitalismo. Es cuestión de oferta y demanda, es una puja de doble vía. El empresario ofrece lo que él entiende que usted merece, y usted lo acepta o lo rechaza.
Bien lo dijo Lenin: "Si no eres parte de la solución, eres parte del problema, actúa".
Es cierto, Canó conectó con los Marineros de Seattle el palo de la gata, por lo tanto debe celebrar y no acusar. El momento de Canó con velitas o con fúa es para celebrar, para gozar, no para buscar culpables, ni acusar.
Con esas declaraciones en Noche de Luz, me luce que Canó odiaba seguir con los Yanquis. Le importaba muy poco el equipo. No quería ser segundo bate, porque ahí no podía lograr los millones de dólares de sueldo como de tercero o cuarto.
No creo que el hijo de José le haga falta alguna a los Yanquis, porque ésto es un deporte de equipo, y él está individualizando su trabajo, pero en "Noche de Luz" se le apagó más de un bombillo, y es una pena y no del alma.
Twitter: @bienvenidorv
Robinson Canó le admitió a Luz García que no fue bien tratado por los Yanquis.
Le tira y abanica.
Miguel de Cervantes Saavedra dijo que "el agradecimiento que sólo consiste en el deseo, es cosa muerta, como es muerta la fe sin obras".
El agradecimiento debe ser eterno, debe ser el principio número uno de la integridad del ser humano.
Canó le dijo a la conductora del programa "Noche de Luz" que los Yanquis no quisieron negociar con él durante el proceso del contrato, y que sólo ofrecieron US$175 millones como su oferta máxima.
Parece ser que Canó no entiende lo que es una relación obrero-patronal en el capitalismo. Es cuestión de oferta y demanda, es una puja de doble vía. El empresario ofrece lo que él entiende que usted merece, y usted lo acepta o lo rechaza.
Bien lo dijo Lenin: "Si no eres parte de la solución, eres parte del problema, actúa".
Es cierto, Canó conectó con los Marineros de Seattle el palo de la gata, por lo tanto debe celebrar y no acusar. El momento de Canó con velitas o con fúa es para celebrar, para gozar, no para buscar culpables, ni acusar.
Con esas declaraciones en Noche de Luz, me luce que Canó odiaba seguir con los Yanquis. Le importaba muy poco el equipo. No quería ser segundo bate, porque ahí no podía lograr los millones de dólares de sueldo como de tercero o cuarto.
No creo que el hijo de José le haga falta alguna a los Yanquis, porque ésto es un deporte de equipo, y él está individualizando su trabajo, pero en "Noche de Luz" se le apagó más de un bombillo, y es una pena y no del alma.
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