POR KIRSIS DÍAZ
Lucharon en la Revolución de Abril de 1965 para devolver al país el gobierno legítimo y constitucional que en 1963 el pueblo dominicano logró con Juan Bosch. Hoy, sus cuerpos yacen en una fosa común en el Cementerio de la Avenida Independencia, sin identificación ni méritos.
A esta fosa con un sencillo empañete por fuera, donde tiraron los cuerpos de decenas de hombres que lucharon por la democracia dominicana, la socióloga Eulalia Flores la llama: la tumba del soldado desconocido.
“Yo vi con mis ojos cómo a ellos los tiraban en el hoyo improvisado a pico y pala, porque no tenían dónde enterrarlos. Los iban recogiendo en la calle (los muertos), y los tiraban con ropa. Yo tenía 25 años en esa época, y la pregunta que se hacía era: ¿cuántos muertos tiraron hoy?”, recuerda Flores, de 70 años.
A propósito de conmemorarse este 24 de abril los 50 años de la Revolución, esta defensora del que fue el primer cementerio del país, propone construir alrededor de la fosa un monumento en honor a estos hombres.
“Considero que ahí debería de ponerse un obelisco con una tarja conmemorativa, porque esos fueron los que murieron luchando”, manifestó.
La socióloga critica que en tiempos del gobierno de Leonel Fernández, se haya construido la Plaza Patriótica a los caídos de la Revolución de Abril del 1965, y la tumba donde están los muertos se quedara sin remodelar.
“En esa Plaza no hay nadie enterrado, los muertos están enterrados aquí, fíjate qué contraste. Estos no tienen nombres, no tienen apellidos, no tienen dolientes, pero sí fueron luchadores, están enterrados aquí, pero no se les ha dado la categoría que merece como un monumento a la tumba del soldado desconocido”, precisó Flores mientras mostraba a Diario Libre el nicho.
Unos diez años atrás, este sepulcro estaba sin empañetar, y fueron varios estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), según su relato, quienes lo empañetaron, pintaron y dejaron una varilla con la intención de ponerle una antorcha recordatoria.
Los identificados
Aparte del obelisco al soldado desconocido, Flores propone crear un monumento en honor a los combatientes de la Revolución de Abril que sí están identificados, y que se encuentran enterrados en este camposanto.
Citó dentro de estos a Luis Reyes Acosta, el comandante Pichirilo, el italiano Illio Capozzi, el francés Andrés de la Riviere, Frank Díaz Vásquez, Ramón Núñez Martínez, Pablo Rodríguez Jacques Viau y a la periodista Yolanda Guzmán.
Un monumento en el olvido
Para esta socióloga, es una pena que el cuerpo sin vida de los combatientes de la Revolución de Abril, así como los de la ocupación haitiana, los de la Guerra de la Restauración, la Anexión a España, poetas, escritores, historiadores y pintores, descansen en un lugar abandonado.
Se trata del primer cementerio del país, inaugurado en 1824 y clausurado en 1965. En sus 16 mil metros, posee, además, un cenotafio (un sepulcro vacío), que fue erigido a la memoria de las víctimas del 3 de septiembre del 1930, a causa del ciclón San Zenón.
“Este cementerio debería ser un monumento funerario, sin embargo, mira la destrucción que hay, mira cómo lo han dejado abandonado, no se le ha dado mantenimiento, y este pudiera ser un destino cultural y turístico, porque es rico en historia”, sostuvo.
En 1987, el expresidente Joaquín Balaguer emitió el decreto 557-87 que declara el antiguo cementerio de la avenida Independencia “Monumento Histórico”, para fines de preservación y restauración.
Balaguer lo consideraba necesario, debido a que el referido cementerio constituye un elemento de tradición en la historia urbanística de la ciudad de Santo Domingo, por contener numerosos monumentos funerarios de valor artístico.
La Dirección Nacional de Parques, la Oficina de Patrimonio Cultural y el Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN), quedaron encargados de dar cumplimiento al citado decreto, sin embargo, el descuido que aún exhibe evidencia su incumplimiento.
De acuerdo con el arquitecto Omar Rancier, este cementerio pudiera convertirse en lo que son los cementerios históricos en otros países: una oferta turística.
“Pero eso hay que trabajarlo. Hay que mejorar las condiciones, los paseos, las aceras dentro y fuera, la iluminación, seguridad, restaurar las piezas que estén dañadas, limpiar las tumbas, pintar y en términos generales hacer un equipamiento de mobiliario, arborización y mejoramiento ambiental de la zona, pero eso primero hay que hacer un diagnóstico, y determinar qué es lo que se tiene que hacer y luego ejecutar”.
El Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN), anunció en julio de 2012, que realizaría un plan de remozamiento y rescate para convertir la necrópolis en una zona turística, al igual que otros cementerios antiguos en distintos países.
En ese momento, el alcalde del Distrito Nacional, Roberto Salcedo, explicó que una vez concluyan los trabajos, el cementerio “sería provisto de un efectivo mecanismo de vigilancia mediante cámaras de vídeo y agentes de la Policía Municipal”.
Dijo que también se procedería a la renovación de todo su sistema de arbolado, tanto interno como externo, así como la construcción y reconstrucción de todas sus aceras internas y perimetrales. Dos años y medio más tarde, el cementerio continúa en el olvido.
Ayuntamiento explica retraso
El encargado del Departamento de Comunicación del ADN, Omar Liriano, explicó a DL que cuando se hizo el anuncio de remozamiento de ese cementerio, realizaron un levantamiento concerniente al trabajo que se iba a realizar.
“Con los otros cementerios que sí están en uso se hizo un levantamiento también incluyendo presupuesto para adecuarlos y corregirles una serie de anomalías, incluyendo el caso de la seguridad, pasó el tiempo y por algunos inconvenientes no se hizo, obviamente que ya esos levantamientos han requerido de otros estudios que desde el año pasado se está trabajando en el cabildo para eso”, indicó.
Aseguró que en la actualidad se está haciendo el levantamiento con presupuesto otra vez, para comenzar a trabajar no sólo en el Cementerio de la Avenida Independencia, sino en otros que corresponden al Distrito Nacional.
“No sé cuál sería el primero, si el de la Independencia, el de la Máximo Gómez o el Cristo Redentor”, apuntó.
Apuntes de la Revolución
Tras producirse el golpe de Estado en 1963, Juan Bosch salió al exilio hacia Puerto Rico.
Con el auspicio de los partidos minoritarios que perdieron en las elecciones de diciembre, las fuerzas armadas nombran un triunvirato. El 29 de noviembre del mismo año, la agrupación política 14 de junio se levanta en armas, declarando la guerra abierta contra el triunvirato.
La lucha por el retorno de la constitucionalidad, se extendió hasta el 21 de septiembre de 1966, con la retirada de tropas de la Fuerza Interamericana de Paz y el ascenso de Joaquín Balaguer al poder.
Lucharon en la Revolución de Abril de 1965 para devolver al país el gobierno legítimo y constitucional que en 1963 el pueblo dominicano logró con Juan Bosch. Hoy, sus cuerpos yacen en una fosa común en el Cementerio de la Avenida Independencia, sin identificación ni méritos.
A esta fosa con un sencillo empañete por fuera, donde tiraron los cuerpos de decenas de hombres que lucharon por la democracia dominicana, la socióloga Eulalia Flores la llama: la tumba del soldado desconocido.
“Yo vi con mis ojos cómo a ellos los tiraban en el hoyo improvisado a pico y pala, porque no tenían dónde enterrarlos. Los iban recogiendo en la calle (los muertos), y los tiraban con ropa. Yo tenía 25 años en esa época, y la pregunta que se hacía era: ¿cuántos muertos tiraron hoy?”, recuerda Flores, de 70 años.
A propósito de conmemorarse este 24 de abril los 50 años de la Revolución, esta defensora del que fue el primer cementerio del país, propone construir alrededor de la fosa un monumento en honor a estos hombres.
“Considero que ahí debería de ponerse un obelisco con una tarja conmemorativa, porque esos fueron los que murieron luchando”, manifestó.
La socióloga critica que en tiempos del gobierno de Leonel Fernández, se haya construido la Plaza Patriótica a los caídos de la Revolución de Abril del 1965, y la tumba donde están los muertos se quedara sin remodelar.
“En esa Plaza no hay nadie enterrado, los muertos están enterrados aquí, fíjate qué contraste. Estos no tienen nombres, no tienen apellidos, no tienen dolientes, pero sí fueron luchadores, están enterrados aquí, pero no se les ha dado la categoría que merece como un monumento a la tumba del soldado desconocido”, precisó Flores mientras mostraba a Diario Libre el nicho.
Unos diez años atrás, este sepulcro estaba sin empañetar, y fueron varios estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), según su relato, quienes lo empañetaron, pintaron y dejaron una varilla con la intención de ponerle una antorcha recordatoria.
Los identificados
Aparte del obelisco al soldado desconocido, Flores propone crear un monumento en honor a los combatientes de la Revolución de Abril que sí están identificados, y que se encuentran enterrados en este camposanto.
Citó dentro de estos a Luis Reyes Acosta, el comandante Pichirilo, el italiano Illio Capozzi, el francés Andrés de la Riviere, Frank Díaz Vásquez, Ramón Núñez Martínez, Pablo Rodríguez Jacques Viau y a la periodista Yolanda Guzmán.
Un monumento en el olvido
Para esta socióloga, es una pena que el cuerpo sin vida de los combatientes de la Revolución de Abril, así como los de la ocupación haitiana, los de la Guerra de la Restauración, la Anexión a España, poetas, escritores, historiadores y pintores, descansen en un lugar abandonado.
Se trata del primer cementerio del país, inaugurado en 1824 y clausurado en 1965. En sus 16 mil metros, posee, además, un cenotafio (un sepulcro vacío), que fue erigido a la memoria de las víctimas del 3 de septiembre del 1930, a causa del ciclón San Zenón.
“Este cementerio debería ser un monumento funerario, sin embargo, mira la destrucción que hay, mira cómo lo han dejado abandonado, no se le ha dado mantenimiento, y este pudiera ser un destino cultural y turístico, porque es rico en historia”, sostuvo.
En 1987, el expresidente Joaquín Balaguer emitió el decreto 557-87 que declara el antiguo cementerio de la avenida Independencia “Monumento Histórico”, para fines de preservación y restauración.
Balaguer lo consideraba necesario, debido a que el referido cementerio constituye un elemento de tradición en la historia urbanística de la ciudad de Santo Domingo, por contener numerosos monumentos funerarios de valor artístico.
La Dirección Nacional de Parques, la Oficina de Patrimonio Cultural y el Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN), quedaron encargados de dar cumplimiento al citado decreto, sin embargo, el descuido que aún exhibe evidencia su incumplimiento.
De acuerdo con el arquitecto Omar Rancier, este cementerio pudiera convertirse en lo que son los cementerios históricos en otros países: una oferta turística.
“Pero eso hay que trabajarlo. Hay que mejorar las condiciones, los paseos, las aceras dentro y fuera, la iluminación, seguridad, restaurar las piezas que estén dañadas, limpiar las tumbas, pintar y en términos generales hacer un equipamiento de mobiliario, arborización y mejoramiento ambiental de la zona, pero eso primero hay que hacer un diagnóstico, y determinar qué es lo que se tiene que hacer y luego ejecutar”.
El Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN), anunció en julio de 2012, que realizaría un plan de remozamiento y rescate para convertir la necrópolis en una zona turística, al igual que otros cementerios antiguos en distintos países.
En ese momento, el alcalde del Distrito Nacional, Roberto Salcedo, explicó que una vez concluyan los trabajos, el cementerio “sería provisto de un efectivo mecanismo de vigilancia mediante cámaras de vídeo y agentes de la Policía Municipal”.
Dijo que también se procedería a la renovación de todo su sistema de arbolado, tanto interno como externo, así como la construcción y reconstrucción de todas sus aceras internas y perimetrales. Dos años y medio más tarde, el cementerio continúa en el olvido.
Ayuntamiento explica retraso
El encargado del Departamento de Comunicación del ADN, Omar Liriano, explicó a DL que cuando se hizo el anuncio de remozamiento de ese cementerio, realizaron un levantamiento concerniente al trabajo que se iba a realizar.
“Con los otros cementerios que sí están en uso se hizo un levantamiento también incluyendo presupuesto para adecuarlos y corregirles una serie de anomalías, incluyendo el caso de la seguridad, pasó el tiempo y por algunos inconvenientes no se hizo, obviamente que ya esos levantamientos han requerido de otros estudios que desde el año pasado se está trabajando en el cabildo para eso”, indicó.
Aseguró que en la actualidad se está haciendo el levantamiento con presupuesto otra vez, para comenzar a trabajar no sólo en el Cementerio de la Avenida Independencia, sino en otros que corresponden al Distrito Nacional.
“No sé cuál sería el primero, si el de la Independencia, el de la Máximo Gómez o el Cristo Redentor”, apuntó.
Apuntes de la Revolución
Tras producirse el golpe de Estado en 1963, Juan Bosch salió al exilio hacia Puerto Rico.
Con el auspicio de los partidos minoritarios que perdieron en las elecciones de diciembre, las fuerzas armadas nombran un triunvirato. El 29 de noviembre del mismo año, la agrupación política 14 de junio se levanta en armas, declarando la guerra abierta contra el triunvirato.
La lucha por el retorno de la constitucionalidad, se extendió hasta el 21 de septiembre de 1966, con la retirada de tropas de la Fuerza Interamericana de Paz y el ascenso de Joaquín Balaguer al poder.
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